Es cierto que existe permiso retribuido “por el tiempo indispensable, para el cumplimiento de un deber inexcusable de carácter público y personal". Pero no vale para este caso porque estos deberes son solo aquellos cuyo incumplimiento implica responsabilidad civil, penal o administrativa. Si la vacuna fuera obligatoria, entonces sí que sería aplicable este permiso.
Muchos convenios colectivos amplían los permisos comunes del ET. Por ejemplo algunos convenios sí que incluyen el permiso retribuido para consulta médica; aunque normalmente solo con el médico especialista, que tampoco valdría para el caso. Pero lo habitual es que el convenio no diga nada al respecto y además en este artículo estamos hablando del caso de los trabajadores en general, no de los de algún convenio concreto.
En los casos generales, el tiempo de vacunación tampoco puede considerarse como retribuido por ser una supuesta obligación de la empresa en materia de prevención de riesgos laborales, porque esas obligaciones solo hacen referencia a “las enfermedades, patologías o lesiones sufridas con motivo u ocasión del trabajo”. Dicho al revés, el personal sanitario en contacto habitual con enfermos de COVID-19 sí que podría considerarse afectado por esta obligación; pero no el empleado de una zapatería porque nunca podría probarse que hubiera cogido el COVID-19 en el trabajo y no en una fiestuqui o en una cena con sus cuñados.
Por todo ello, está clarísimo que pronto vamos a estar ante un problema laboral grave porque hay que vacunar a millones de trabajadores. Si a un trabajador le citan para ir a ponerse la vacuna el lunes a las 10 de la mañana, coincidiendo con su horario laboral, ¿qué hace? ¿Recupera el tiempo en su día libre? ¿Se coge un día de vacaciones? ¿Deja que le descuenten el tiempo empleado de la nómina? ¿Dice que no se vacuna? ¿Falta a la cita? ¿Dice que le pongan otra hora? ¿Y si luego le cambian el horario en la empresa? ¿Y si luego ese día le mandan a Soria a no sé qué? ¿Triplicamos el nº de telefonistas del Sistema Público de Salud para que los trabajadores puedan cambiar su cita cuando al encargao de su empresa le venga bien o le salga de los cataplines para joder? ¿Qué van a hacer los trabajadores "sin papeles" del hogar, del campo, de la hostelería y de la ayuda a domicilio? ¿Qué van a hacer los empresaurios al respecto, facilitar las cosas o ir a lo suyo?
La solución evidente y sencilla sería que en uno de los tantísimos reales decretos que han aprobado por el tema del COVID-19 se hubiera incluido un permiso retribuido para recibir la vacuna. O incluso una reforma exprés por real decreto del art.37 ET para incluir el permiso retribuido por el tiempo necesario para asuntos médicos relacionados con la salud pública; no solo para ahora sino también para el futuro contra cualquier brote, pandemia o epidemia de cualquier enfermedad grave. Pero no lo han hecho, son plenamente conscientes de que no lo han hecho y a la oposición resulta que también se le ha olvidado pedirlo. Por lo visto hay que luchar contra el virus para recuperar la economía, de lo que las empresas serían las principales beneficiadas, pero que los trabajadores contribuyan a ello con su tiempo libre.
Se trataría de un deber Público inexcusable y por tanto debería tener un permiso para cumplir ese deber pero según la doctrina del Tribunal Supremo las necesidades de cuidados, la salud incluida forman parte del ámbito privado.Entonces o el Gobierno progresista de Africa del Norte Españistan saca una Decreto o se deja en manos del Ego de Pravia del Empresaurio de turno.Si es que pedimos muchos los trabajadores y no pue ser.
ResponderEliminarPues pasará que el empresario pequeño, muy pequeño, dejará ir a vacunarse a sus trabajadores (de 1 a 3) y pagará esas horas como un bendito. Y el empresario grande, hará lo posible por joder a sus empleados porque, mal que nos pese, tiene toda la razón en no querer pagar un tiempo que sus trabajadores no la marcan.
ResponderEliminarQue no se vacunen. Cuando den positivo por Covid, pagará la cuarentena o la IT.
EliminarEl que haga eso demostrará que no sabe ni manejar su propio negocio. Como ya ha dicho un compañero, en vez de dar unas horas para vacunar, tendrá que pagar los primeros días de la baja por cuarentena o por enfermedad.
EliminarPeor aun, si en su empresa se produce un brote, pudiera ocurrir que en esa empresa no se hayan respetado las normativas sobre distancias, etcétera, y se exponga a sanciones y a reclamaciones. Como las cosas todavía pueden empeorar, resulta probable que tenga que suspender su actividad durante un par de semanas, para honda satisfacción de clientes y de proveedores. Incluso es posible que haya clientes que le tengan respeto a la enfermedad, y se lo piensen dos veces antes de volver a pisar esa empresa.
Por último, si una megaempresa se dedica a tocar las narices a sus trabajadores con esos detalles, logrará que esos “productores” (qué pena que se pierda la terminología de otros tiempos más felices; modo ironía:off) sientan tal aprecio por su empresaurio que presten suma atención a lo que hacen, nunca se equivoquen, y traten a los clientes a cuerpo de rey.
Un empresario inteligente sabe que su mejor activo son sus trabajadores. Pero hablo de empresarios, no de empresarios, fauna excesivamente abundante.
Pues más claro, el agua. Sí tanta insistencia en la necesidad de vacunarse para sufrir la enfermedad con síntomas menos graves en caso de contagio, porque aún vacunado uno se puede contagiar y contagiar a otros, y un tema tan banal como acudir a la cita que te impone tu centro salud en la hora que te toque, no pueda ser un permiso retribuido en la mayoría de los casos! Y que no se quiera regular, hace que las sospechas es quieren que sea el trabajador el que se lo tenga que tomar con “ajo y agua”. !Con todos los decretos que han aprobado en relación al COVID-19!
ResponderEliminarAfortunadamente ya ha hay algunas sentencias fallando la nulidad del despido por vulneración de derechos fundamentales al haber utilizado el contagio por el virus como causa extintiva, pero qué pasará cuando los trabajadores tengan que ir a vacunarse y lo deban hacer cuando no les venga bien a sus jefes y empresas, habrá sanciones disciplinarias ? Indudablemente que sí más si pones objeciones a recuperar ese tiempo invertido en una obligación sanitaria.
Los que nos gobiernan lo resolverán o si quiera lo han previsto?
Como se trata de una cosa opcional el ir a vacunarse. El que quiera ir y le pille trabajando tiene que tener la posibilidad de cambiar la hora. (Sin que tengan que sufrir las arcas públicas que ya están adeudadas con ese coste). Cómo es lógico.
ResponderEliminarLo suyo es que se habilite una aplicación y tb. por teléfono para quien no tenga la posibilidad de Internet. Para poder modificar su cita dentro de los horarios de ese día (Y con una antelación mínima).
Ejemplo: te mandan sms que te toca día tal a las 10 am. En ese sms te pueden indicar como modificar la hora. (Llamando por tlf o la dirección web dentro del mismo día). Y que tienes un plazo para hacerlo.
Los Servicios de Salud no están funcionando así al menos el que yo conozco, si te llaman o vas o te ponen al final de la lista y puede que te llamen otro dia dentro del horario laboral, no dan elección.Con respecto al coste que la gente no esté vacunada implica un mayor coste y no solo económico para la sociedad en su conjunto no para los empresarios solamente.
EliminarHaga un curioso experimento: intente llamar por teléfono a un centro de salud para una cita, y luego me dice si es fácil o no cambiar el horario. Aparte que los trabajadores de los centros de salud son tan raros que también desean horarios laborales que les faciliten tonterías como la conciliación de la vida laboral y familiar. Si hay que estar de guardia a las tantas para atender urgencias (urgencias, que no chorradas), pues se está y, si a alguien no le gusta, que se pase a la construcción, que verá como en ese gremio atan os perros con longanizas.
EliminarPero una cosa es la disponibilidad por si pasan cosas a deshoras, y otra destruir la vida familiar por conveniencia de algunos caraduras. En esto, otro ejercicio interesante sería preguntarle a Manolo el del bar a qué hora tienen que vacunar a la Toñi ¿El jueves a las tres de la mañana, o el viernes a las seis?
y tanto que les gusta hablar de la colaboración público-privada....dónde están esas asociaciones sin ánimo de lucro,llamadas mútuas, para que colaboren en facilitar la vacunación en los centros de trabajo??...que aprovechen las revisiones anuales de vigilancia de la salud (chequeos médicos) y al mismo tiempo vacunen, eso si, todas las dosis bien controladas, con su numeración y a quién se la ponen.
ResponderEliminarVaya, por lo que veo en este artículo soy una privilegiada porque en mi convenio correcto (importante lo de correcto con la panda de empresarios que me ha tocado, que aplicaban dos convenios distintos hasta hace nada según lo que les resultara conveniente) tengo 35h anuales retribuidas para visitas médicas y sanitarias tanto de cabecera como especialista, pruebas y tratamientos, así que en mi caso cuando me llamen puedo ir sin que me quiten ni un céntimo de la nómina. Flipo conque para tener este derecho haya que depender del convenio (o sea de la patronal y los sindicatos bienportados) y no esté reflejado en el ET. Soy muy ignorante aún.
ResponderEliminarNo es nada raro. Clásicamente, ha sido mucho más barato ofrecer tontadillas en cuestiones de salud, que poca gente aprovecha, en vez de derechos de verdad. Por ejemplo, ¿Cuánta gente aprovecha esas 35 horas anuales? Hay casos (como los padres de niños pequeños que están siempre con fiebre) pero lo habitual es que no se aproveche ni un minuto.
EliminarOtra sinecura clásica es ofrecer un examen en salud cada cierto tiempo (una revisión). No importa que se sepa que esos exámenes apenas sirven para nada: se ha visto que lo único útil es tomar la tensión arterial. Pero luego queda muy majo que una vez al año se vaya una tarde (fuera del horario laboral, obviamente) a una clínica privada de esas con mucho mármol y matojos en las esquinas, a que un señor con la bata bien planchada nos diga como tenemos el colesterol. No salva vidas (ni una, está demostrado, revísese las publicaciones científicas sobre la cuestión) pero sirve para satisfacer a trabajadores y representantes, y que no pidan tontadas como puedan ser salarios más elevados, más días de vacaciones, u otros caprichos propios de rojeras.