Si habláramos de sindicalistas reales ya estarían respondidas las preguntas que todos os hacéis. En síntesis, las funciones de los sindicalistas son informar y ayudar eficazmente a los trabajadores, les paga su sindicato y ese es el trabajo que hacen todos los días durante toda su jornada. Pero la realidad, no conocida por todos pero sí por muchos, es que en muchísimos casos, por no decir la mayoría, no hablamos de sindicalistas reales contratados por sindicatos reales, sino de “sindicalistos” contratados por “sindicatos”.
En Laboro hace años que introdujimos, con todo éxito, el sustantivo “sindicalisto” para referirnos a las personas contratadas por “sindicatos” simulados como CC.OO. y UGT, cuyas funciones principales no son defender e informar correctamente a los trabajadores, sino otras. Las funciones principales y reales de un “sindicalisto”, por orden absoluto de prioridad, son las siguientes:
La principalísima función, totalmente imprescindible e inexcusable, es votar a quien le digan en los siguientes congresos provinciales y autonómicos de la federación correspondiente y más aún en los congresos confederales (estatales). Este es también el principal “mérito”, y en ocasiones el único, que explica la contratación de los “sindicalistos”, a veces durante décadas. La razón es que en los congresos se elijen a los miembros de las comisiones ejecutivas de los “sindicatos”; aunque en los congresos se “olvidan” de explicar que simplemente son los que van a seguir cobrando del “sindicato” otros cuatro años y ni siquiera explican quiénes cobran y quiénes no. El truco es que prácticamente todos los congresos de CC.OO. y UGT, especialmente los confederales y federales autonómicos, se celebran como congresos “a la búlgara”. Una candidatura única decidida y anunciada previamente desde arriba dentro del propio “sindicato”. Quien tenga huevos, que presente una candidatura alternativa. En resumen, la primera y principal función del “sindicalisto” es hacer que siga cobrando del “sindicato” el otro “sindicalisto” superior que decidió su contratación.

Los bolos son también los actos sindicales de autobús, que generalmente se celebran en Madrid con público de “sindicalistos” de toda España. Así como cualquier manifestación por temas digamos que progresistas. ¿Qué no sé dónde hay una manifestación feminista, LGTBI, contra la guerra de...? Pues allá que te van los sindicalistos con el único objetvo de colocarse con las banderitas cerca de la cabecera para que salgan en la tele y en las redes sociales. Eso es publicidad gratuita para que la gente se crea que CC.OO. y UGT son organizaciones progresistas, cuando en la práctica son todo lo contrario.
Los bolos de asistencia ineludible son aquellos en los que un “megasindicalisto” vaya a cobrarle una factura al “sindicato” o a alguno de sus chiringuitos. Por ejemplo, cursos de formación interna del “sindicato”, jornadas de no sé qué… Se distinguen muy fácilmente, porque o bien hacen firmar la asistencia, para cobrar en función del número de asistentes, o bien se regalan a los asistentes unos libros que nadie lee u otros materiales, que el “supersindicalisto” cobrará al “sindicato” y/o a sus fundaciones mediante la correspondiente factura desde alguna de sus empresas o de sus familiares.
- Los “sindicalistos” pringaos de nivel 1, que hacen el trabajo real, además de votar a quien les digan e ir a los bolos.
- Los “supersindicalistos” de nivel 2, que lo único que hacen es votar a quien les digan e ir a los bolos, porque para el trabajo real contratan a los “pringaos” y disponen de los liberados. Son los que deciden si se firman los convenios o no se firman, sobre todo los convenios “sabrosones” de empresas que pagan con liberados y de otras formas.
- Los “megasindicalistos” de nivel 3, que son los que meten facturas que nadie les pagaría si no tuvieran relación con el “sindicato”.
Los trabajadores que acudís a los sindicatos sois atendidos por “sindicalistos” pringaos o por liberados. Los otros no atienden a los trabajadores y muchos ni sabrían hacerlo, por desconocer lo más básico del derecho laboral nivel Blippi, sin que ello les impidiera levantarse más de 40.000€ anuales + casa + coche + teléfono ocultándolo ilegalmente. Es curiosísimo que el chollo de los “sindicatos” como forma de vida y de negocio lo tengan montando de tal forma que prácticamente ningún afiliado sepa quiénes son ni cómo se llaman los dirigentes que se supone que nombraron por unanimidad en los congresos y que son los que más cobran.
En el próximo artículo de esta serie explicaremos cuáles son las funciones reales de los “sindicalistos” pringaos, porque son los que os atienden a los trabajadores.


No hay comentarios:
NO SE CONTESTAN las consultas laborales en los comentarios. Dichas consultas son un servicio profesional de pago y se hacen mediante el formulario de consulta laboral privada. Los auténticos comentarios siguen unas normas aconsejables. Puedes gestionar tus comentarios si tienes una cuenta en Google.