Toñi la camarera quiere vacaciones en agosto.

Y también las quiere Porfirio el que se tiró por la ventana y Jacinto el ingeniero y un montón de trabajadores más, por no decir la mayoría. No vamos a hablar de trabajadores que se van de vacaciones en agosto porque no les queda más remedio, por ejemplo porque cierran su empresa o la de su pareja, sino de trabajadores que quieren a toda costa tener sus vacaciones en agosto, como uno de sus objetivos laborales preferentes y puede que hasta el único. Vamos a ver por qué es así en muchísimos casos.

Es evidente que los trabajadores pueden preferir sus vacaciones laborales en agosto para que coincidan con las vacaciones de sus hijos o con las de su pareja, porque sean las fiestas de su pueblo o por simple gusto personal. Pero también tenemos los casos de los trabajadores que no es que prefieran o necesiten sus vacaciones en agosto, sino que las quieren en agosto porque sí, sin que haya una causa racional para ello.

Estos trabajadores quieren sus vacaciones en agosto simplemente porque los demás también las quieren en agosto. ¿No lo entiendes? Pues te lo van a explicar rápidamente Porifiro, Toñi y Jacinto. A ver si voy a ser yo el más tonto, dice Porfirio. Si las pidiera en julio le estaría regalando a la Paqui que se las dieran en agosto, dice Toñi. Las quiero en agosto porque me lo puedo permitir y yo no voy a ser menos, dice Jacinto el ingeniero miembro de la clase media y orgulloso de serlo, no de la clase trabajadora.

Los empollones gafotas de la psicología, la sociología y la neurociencia han bautizado este comportamiento como “deseo mimético”. Lo teorizó René Girard en lo que llamó el deseo triangular, cuyos tres ángulos son: 1- el sujeto que desea, 2- el objeto deseado y 3- el modelo cuyo propio deseo designa el objeto como deseable y que el sujeto señala como deseable porque quiere imitar al modelo. Si deseo un coche SUV con llantas llenas de pulgadas no es porque me guste ni menos aún porque me haga falta, sino porque “todo el mundo” lo quiere. De tal forma que el principal interés no es el objeto del deseo sino la rivalidad con el modelo.

Pero el amigo Girard se quedó muy corto en el caso de los españistanos, porque no solo buscan la rivalidad con el modelo sino también el perjuicio directo o indirecto del modelo. El deseo mimético en Españistán se llama "que se jodan". De forma que Toñi la camarera, Porfirio el que se tiró por la ventana y Jacinto el ingeniero no solo quieren las vacaciones en agosto porque “todo el mundo” las quiere en agosto, sino también para joder a sus familiares, amigos y compañeros de trabajo a los que no se las den en agosto. O más lejos aún: para disfrutar viendo que a otros no se las den en agosto.

Los trabajadores que no preferís las vacaciones en agosto, sino todo lo contrario, tenéis muy fácil identificar a vuestros Porfirios, Jacintos y Toñis. Son los que se extrañarán cuando les digáis, por ejemplo, que prefiráis las vacaciones en junio o en septiembre porque hay muchísima menos gente y porque hace muchísimo menos calor. No solo se extrañarán sino que lo pondrán en duda, o incluso os dirán directamente que no se lo creen. Aunque sí que se lo crean, porque para ellos no se trata de eso. Para ellos se trata de que las vacaciones en agosto son mejores porque lo dice todo el mundo y punto final. Por eso pelean por sus vacaciones en agosto y no pueden admitir que a ti no te joda que no te las den en agosto y menos aún que no te joda que a ellos sí que se las den en agosto. Se les derrumbaría todo su inestable chiringuito psicológico y vital.

Por supuesto, son los mismos trabajadores que les jode que a unos les suban el sueldo más que a otros y prefieren que no se lo suban a nadie. Son los mismos que les jode que a otros trabajadores les den una reducción voluntaria de jornada o cualquier cosa que hayan pedido a la empresa, como los nuevos permisos familiares. Son los mismos que siempre quieren comprar un décimo más que los demás de la lotería de Navidad de la empresa. Son los mismos que disfrutan votando para joder a otros.

No dejéis de escribir un comentario contando vuestras experiencias con las Toñis, los Jacintos y los Porfirios en los temas de fechas de vacaciones. Que nos riamos un poco todos.